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El conselleiro do Medio Rural, José González, asistió este sábado a la entrega de premios de la asociación de productores de aceite y aceituna de Galicia (APAG) en Quiroga y destacó la vocación «aceitera» de este ayuntamiento y del entorno y que supone un elemento dinamizador para desarrollar la zona.

«En estas tierras del sur este de la provincia de Lugo se encuentran algunos de los olivos más antiguos de Galicia, muchos de ellos centenarios», declaró el titular do Medio Rural, que también recibió un galardón por su compromiso con la APAG. Respecto a la asociación destacó la labor de los más de cien socios que la conforman, ya que dan valor a las tierras y contribuyen a mantener un campo vivo y dinámico, «entendido no solo como un lugar para trabajar, sino también como un espacio en el que residir, con calidad de vida», en palabras de José González.

Los galardones más especiales fueron para dos vecinos del entorno, una productora y un ‘maestro almaceiro’ precursores de la producción de aceite en la zona. Pero entre los premiados también estuvieron la Fundación Juana de Vega y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). En este sentido, el conselleiro puso en valor el «magnífico trabajo» realizado por los investigadores del CSIC para identificar y conseguir el reconocimiento oficial de dos variedades de olivo autóctonas de Galicia, como son la brava y la mansa gallegas.

Estos técnicos constataron además que ambas presentan un alto nivel de adaptación a las condiciones climáticas de nuestra comunidad y que son originales tanto por la forma de las hojas de la planta o del fruto como también por las características de los aceites que producen. «Tenemos, pues, variedades con personalidad propia, bien definida, algo fundamental para distinguirnos en el mercado», señaló José González.

Medio centenar de explotaciones

La asociación de productores de aceite y aceituna de Galicia (APAG) se creó a finales de 2014 y actualmente aglutina un centenar de asociados, que cuentan en total con unas 115 hectáreas de cultivo en distintas zonas de Galicia y que suman más de 130.000 olivos.

En Galicia hay cerca de 40 explotaciones dedicadas al cultivo de olivo, la mayor parte concentradas en la comarca de Quiroga y Valdeorras. «Tenemos, por lo tanto, en Quiroga, los principales ingredientes para garantizar el éxito presente y futuro del aceite gallego: historia, cultivo, tierra y hombres y mujeres implicados en esta labor ancestral», concluyó el conselleiro.