La Xunta de Galicia apoya las bodegas de la Ribeira Sacra lucense con ayudas directas que superan los 703.240 euros y que permitieron movilizar inversiones por valor de 1,9 millones de euros, dirigidos a promover mejoras en sus instalaciones e impulsar su actividad.
Así lo explicó esta mañana el delegado territorial de la Xunta en Lugo, José Manuel Balseiro, en el transcurso de una visita a la adega Val da Lenda, en Sober, donde aprovechó para hacer balance de estos apoyos, «que contribuyen al fortalecimiento de un sector, como es el del vino, estratégico para la economía de la comarca y de la provincia»
El grueso de las aportaciones proceden de la Consellería do Medio Rural, a través de las líneas de apoyo a la comercialización y transformación de productos agrarios y de las aportaciones del anterior Instituto Galego da Calidad Alimentaria. Pero también recibieron otras ayudas con cargo a los recursos del Grupo de Desarrollo Rural (GDR) o del Instituto Galego de Promoción Económica (Igape), en este último caso, organismo perteneciente a la Consellería de Economía, Emprego e Industria.
Catorce bodegas en cuatro ayuntamientos
Según explicó Balseiro, hasta el momento las aportaciones se distribuyen entre quince bodegas, que decidieron acogerse a las distintas líneas de apoyo disponibles, todas ellas emplazadas en los ayuntamientos de Sober, Chantada, Pantón y O Saviñao. Con todo la mayor parte de las ayudas descritas son de convocatoria anual y siguen el procedimiento de concurrencia competitiva.
A estas subvenciones directas habría que añadir otras iniciativas de apoyo como las dirigidas a unir esfuerzos entre el mundo vitivinícola y la agenda turística, un área en la que Galicia está avanzando, con diversas actividades y eventos en los que la Ribeira Sacra es todo un referente.
Y también tendrían que añadirse los apoyos al Consello Regulador da Denominación de Origen Ribeira Sacra que ampara el trabajo de más de 2.400 viticultores y de las cerca de 90 industrias inscritas en este sello de calidad.
Adega Val da Lenda
La producción de vino en la adega Val da Lenda se remonta varias generaciones, pero desde 1991, lo que hasta entonces era una pequeña empresa familiar se convirtió en uno de los pioneros de la Denominación de Origen, dentro de la zona de Amandi.
Los viñedos de esta bodega ocupan las laderas inclinadas de las terrazas del río Sil donde el tamaño pequeño y de difícil acceso, implican el desarrollo de una viticultura que está calificada cómo heroica.
Esta bodega se benefició recién de una ayuda del Grupo de Desarrollo Rural Ribeira Sacra-Courel para la ampliación y acondicionamiento de una nueva sala de embotellado, gracias a rehabilitación de una edificación anexa. Esto permite disponer de espacios propios para el etiquetado y taponado de botellas, distintos a los destinados a la elaboración del vino. A lo largo de los últimos años también recibió distintos apoyos de la Consellería do Medio Rural para la adquisición de equipaciones y para la implantación de un programa de rastreabilidad y otras mejoras en bodega.
El delegado territorial estuvo acompañado por el alcalde de Sober, Luís Fernández Guitan, por el presidente del GDR Ribeira Sacra Courel, José Manuel Arias, de la secretaria primera del Parlamento de Galicia Raquel Arias Rodríguez, además de representantes del Consello Regulador da Denominación de Origen Ribeira Sacra, entre otros.
