Román Rodríguez visitó este viernes las obras en la iglesia de Santo Estevo de Ribas de Miño

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La Xunta de Galicia está destinando 3 millones de euros para poner en valor bienes patrimoniales de los ayuntamientos de Lugo incluidos en el paisaje cultural de la Ribeira Sacra. Así lo expuso hoy el conselleiro de Cultura, Educación e Universidade, Román Rodríguez, en una visita a las obras de la iglesia de Santo Estevo de Ribas de Miño, en O Saviñao, en las que el Gobierno gallego está invirtiendo más de 300.000 euros. El titular de Cultura, que estuvo acompañado por el alcalde, Juan Carlos Armesto, y el delegado territorial de la Xunta en Lugo, Javier Arias, subrayó la importancia de la inversión para la Ribera Sacra comprometida en este ejercicio, el año de su posible declaración como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Se trata de un esfuerzo presupuestario que, tal y como indicó, se refleja en un incremento del 19% en los fondos dedicados la conservación de bienes patrimoniales. «O patrimonio cultural simboliza o noso pasado e debemos impulsar a súa recuperación para non esquecer de onde vimos e encarar o noso futuro», afirmó.

En este sentido, destacó que la Ribeira Sacra representa «lo mellor do noso patrimonio cultural e artístico, polo que é importante que continuemos traballando na súa conservación para que siga sendo un legado vivo e unha fonte de orgullo para todos os galegos». En el caso concreto de la iglesia de Santo Estevo de Ribas de Miño, la intervención impulsada por la Xunta de Galicia, y confinanciada con fondos FEDER, está permitiendo mejorar las condiciones de conservación y mantenimiento de este monumento reconocido como Bien de Interés Cultural (BIC) con la categoría de monumento desde 1931.

Así, el proyecto en marcha se centra en las condiciones de conservación y mantenimiento de los paramentos exteriores de la fábrica, reparando grietas y fisuras, así como en la mejora de las condiciones de ventilación de la iglesia y elementos escultóricos del exterior del templo. Concretamente, los técnicos están restaurando la cubierta de la nave y ábside sustituyendo las tejas de cerámica, la estructura de madera y las ventanas existentes por otras que permitan la ventilación continua. Asimismo, se restauran los elementos deteriorados de las puertas principales y laterales de la iglesia y se redactan los proyectos de restauración de los elementos escultóricos de la portada, huecos románicos y cornisas.

Para poder realizar estos trabajos, la Consellería de Cultura, Educación y Universidad firmó un convenio de colaboración con la Diócesis de Lugo.

Elemento emblemático de la Ribeira Sacra

La iglesia de Santo Estevo de Ribas de Miño es uno de los bienes más emblemáticos de la Ribeira Sacra. Su interior, datado a finales del siglo XII, es similar al de la vecina San Paio de Diomondi y cuenta con una sola nave dividida en cuatro tramos y con techumbre a dos aguas de madera. Como en el caso de Diomondi, esta cubierta se apoya sobre grandes arcos transversales oxivales de posible origen posterior a la fábrica principal de la iglesia, claramente románica.

Además, cuenta con una fachada principal dividida en dos partes por un gran parteluz de arquitos semicirculares peraltados, apoyados en canzorros decorados con florones cuadrangulares inclinados. El cenobio, por su parte, está dedicado a santo Estevo, uno de los primeros diáconos de la Iglesia que, junto a los apóstoles, comenzaron la evangelización.

Quince intervenciones

La inversión hecha en este templo forma parte de los 3 millones de euros que el Gobierno gallego destina a restaurar, conservar y poner en valor bienes patrimoniales en seis ayuntamientos lucenses de la Ribeira Sacra desde el inicio de la candidatura.

En este sentido, Román Rodríguez precisó que desde el año 2107 se ejecutaron mejoras en cerca de una quincena de bienes de la provincia de Lugo como las iglesias de Santa María de Nogueira de Miño y Santa María de Pesqueiras, en Chantada; el colegio del Cardenal, la iglesia de San Vicente de O Pino y el convento de las Clarisas, en Monforte de Lemos; el Pazo de Diomondi, en O Saviñao; en el monasterio de Santa María de Ferreira de Pantón y en las iglesias de Santo Estevo de Atán y de Pombeiro, en Pantón; en la iglesia de San Xoán, de Portomarín, o en las iglesias de San Vicente de Pinol y San Xiao de Lobios, en Sober.